lunes

El de las normas de convivencia


Número 1:

Las tareas de limpieza se realizarán de manera conjunta o separablemente habiendo llegado a un acuerdo con el resto de habitantes con anterioridad. Los electrodomésticos de uso común deberán limpiarse al finalizar su uso. Los restos de pescadito frito siempre deberán ser retirados de la freidora al terminar, sin excepción alguna.

Número 2:

La nevera se separará en diferentes partes dependiendo del número de personas viviendo en la misma casa para poder diferenciar las cosas de cada uno. Siempre se podrán comprar alimentos en grupo para el uso común de cada individuo. Se podrá barajar la idea de comprar diferentes muebles para almacenar productos y así evitar peleas y guerras de pan duro si así se creyera necesario. El helado para momentos de depresión siempre se considerará de uso común.

Número 3:

La lavadora es un bien común y podrá ser usada para mezclar diferentes prendas de diferentes personas si con ello se procede a ahorrar en consumo de luz y/o agua.
En el caso de desteñimiento involuntario de cualquier prenda, el responsable pagará daños y perjuicios al damnificado.

Número 4:

La plancha no es un bien común y no existe ningún deber sobre la persona que decide usarla a hacer labores de caridad ajenas, salvo casos previamente acordados en los cuales las personas implicadas deberán haber llegado a un acuerdo antes de realizar cualquier tipo de obra de caridad que evite el trabajo al prójimo. Si se diera el caso de que una prenda se quemase durante una labor de caridad hacia cualquiera de los compañeros, el dueño de la prenda deberá morder una toalla y sustituir lo estropeado por otra cosa.

Número 5:

La basura generada en la casa se recogerá antes de que empiece a rebosar el cubo o cuando comienze a ser presente en el ambiente a la altura de las narices, en el caso de que los desperdicios sean excesivamente olorosos.

Número 6:

Las esponjas y los cepillos de dientes tampoco son bienes comunes y el uso indebido ajeno puede ser castigado con labores diarias caseras de hasta dos meses si así se decidiera en una reunión de los habitantes de la casa en la que la persona acusada no estaría presente.

Número 7:

Los sofás del salón y/o el mando de la televisión no tiene nombre grabado ni dueño en el caso de que la compra haya sido de manera conjunta. El primero que se apodera de ello es el que tiene la última palabra. Queda prohibida la guerra de cojines o de cualquier otro tipo de elemento arrojadizo.

Número 8:

Las reuniones caseras se avisarán con suma antelación para poder dar tiempo al resto de habitantes a buscar una buena excusa para no quedarse en ella, siempre que la gente invitada sea de poco agrado.
En el caso de celebrarse fiestas de pijamas no será optativa la decisión de no llevar ropa. El mismo nombre hace alusión a un tipo determinado de prenda que vestir durante la fiesta.

Número 9:

En el caso de reuniones familiares o visitas de los mismos, el sujeto vinculado será responsable de cualquier tipo de comentario soez de la madre, padre o cualquier otro miembro de la familia, corriendo el riesgo de sufrir la parcial o total ignorancia del resto de habitantes si estos se vieran afectados por cualquiera de esos comentarios.

Número 10:

Las fiestas celebradas en casa correrán a cargo de la persona organizadora, implicando también con ello a hacerse cargo de cualquier tipo de desperfecto ocasionado por cualquier tipo de energúmeno partícipe del evento durante toda su duración.

Número 11:

El nivel del volumen de la música perteneciente a cualquier habitante podrá ser modificado por cualquiera del resto de compañeros si se considerase necesario por ser causa de molestia en cualquiera de sus variantes o simplemente odio hacia ese determinado estilo musical.

Número 12:

Los habitantes de la casa tienen la obligación de ayudarse los unos a los otros tanto en las tareas conjuntas como en momentos en los que se precise la ayuda física o psicológica de cualquiera del resto de individuos que ocupan la casa. Los abrazos son de carácter obligatorio sin excepción alguna si de ellos se precisara. En ocasiones, fuera de periodo de alergias, la compra de pañuelos de papel podrá ser de manera conjunta.

Número 13:

El respeto hacia el resto de personas que habitan en la casa es también de carácter obligatorio debiendo hacerse notar de manera visible hacia los ojos ajenos sin necesidad de usar gafas de ver.

Gracias por tu colaboración

3 comentarios:

Dani dijo...

Uuuuh! Esto me recuerda a nuestra contitución altillal. A ver cuanto tarda en quejarse y montar un golpe de estado alguien! Suerte y que te duren mucho las noras xD

Fernando Bside dijo...

Me parece que muchas personas deberían de utilizar estas normas de convivencia, normal que muchas veces la gente se mate en la convivencia. A ver si se pueden materializar en próximos meses para todos jeje.

Un abrazo tan grande como largo es el Paseo de la Castellana.

Anónimo dijo...

que miedo... creo q pedire un referendum o un estatut que está mu de moda... jejeje...