lunes

El de los cambios

Pues resulta que ahora me ha dado por esto, queridos.
Quién me iba a decir a mi que años después de mi primer Amstrad que sólo valía para jugar y desesperarte, iba a conseguir un PC con interné y todo.
Así desembarco en la era digital... otra vez. Porque la primera ya sucedió hace unos añitos. Pero eso es otra historia.
Ahora han cambiado muchas cosas: las teles de plasma, los DVDs, los tamagotchis, la calidad de vida, el precio de los pisos, el bigote del Presidente... Estamos en la era de los cambios y nadie puede detenerlo. Sólo queda conformarse, porque la otra opción es echarse a llorar, y no es plan porque te deshidratas.
Así yo me conformo con muchas cosas, aún siendo un inconformista, que me lo dice mi madre con estas palabras exactas: "Tio, eres un inconformista" . Y tiene razón.
Esta mañana estuve en Media Markt Alcorcón y, por primera vez en muchos años, no me he comprado ningún DVD. Había ido yo con mis queridos Jose y Bea a dar una pequeña vuelta en plan Sábado por la mañana con una sana intención: quedarme a comer por algún sitio con tal de no estar en casa a la hora de comer. Es Sábado, la gente se divierte, qué vida tan aburrida, a veces hago algo.. pero, y el resto?? NADA. Voy a pillarme un pedo del 12 cualquier finde, pero qué pereza, si hasta eso me echa atrás hacerlo. Tengo que hacer algo con mi vida, y de pronto... Joder, ya es Domingo, se me pasa el tiempo volando, a ver si descanso un poco más que no paro.
No hay quien te entienda tio, tu vida parece una película de Tarantino, tiene unos giros inesperados.
Aún sigo echándo de menos aquel añito en London City, ciudad bohemia donde las haya. Ciudad que nos acogió como si fuéramos los Reyes de España, que lo éramos, pero no tanto.
Qué estilo de vida tan envidiable, qué calidad de vida, qué adelantos, qué gente tan civilizada, qué gusto andar por esas calles tétricas y no tener miedo, o al menos no tanto. Ciudad que me dió la libertad, dónde aprendí que ser independiente tiene muchas desventajas, y también cosas buenas. Algún día contaré algunas cosas que allí tuve ocasión de disfrutar.
Pero ahora volvamos donde me había quedado...

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